Argentina: Crecimiento Nominal del Consumo y Contracción en Términos Reales Ante las Presiones Inflacionarias

Análisis de Mercado por Quasar Elizundia, Estratega de Investigación Experto en Pepperstone

24 de enero de 2025 –

Los últimos datos de ventas minoristas en Argentina presentan una imagen compleja, donde el crecimiento nominal se enfrenta a la dura realidad de la persistente inflación. Si bien las cifras nominales muestran un robusto aumento del 138.7% interanual en noviembre, un análisis más profundo revela una contracción real del 7.6% y una caída acumulada del 11.9%. Esta dicotomía subraya los desafíos que enfrenta la economía argentina en su búsqueda de una recuperación sostenible.

El marcado contraste entre el crecimiento nominal y la contracción real en el consumo destaca la necesidad de seguir abordando las presiones inflacionarias como un factor crítico para una recuperación económica genuina. El crecimiento nominal está impulsado principalmente por bienes esenciales como productos de limpieza y lácteos, lo que indica una clara priorización del consumidor hacia las necesidades básicas en medio de la continua erosión del poder adquisitivo. Este comportamiento del consumidor, aunque comprensible, limita la expansión de otros sectores y restringe el potencial de crecimiento económico general.

La priorización del gasto en bienes esenciales refleja la continua presión sobre los presupuestos familiares, un factor que debe ser monitoreado de cerca para evaluar la verdadera salud de la economía.

A pesar de estos desafíos, hay signos positivos que sugieren cierta resiliencia. El Indicador Líder (IL) muestra un crecimiento mensual del 2.45%, mientras que el Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE) registra su séptimo mes consecutivo de expansión, con un aumento del 0.21%.

Además, el Índice de Difusión, que alcanzó el 80% en diciembre, señala mejoras en componentes clave de la economía y reduce la probabilidad de una recesión al 6.9%. Si bien estos indicadores positivos ofrecen un respiro, no deben oscurecer los problemas estructurales subyacentes que deben abordarse para garantizar un crecimiento sostenible a largo plazo.

Los datos de INDEC también revelan que, a precios constantes, las ventas minoristas aumentaron un 3.8% interanual en noviembre, lo que invierte la contracción del 7.8% del mes anterior. Entre las categorías, Ocio y Recreación, Alimentos y Restaurantes, y Electrónica y Computadoras mostraron los mayores aumentos nominales. Sin embargo, al ajustarse por inflación, la imagen se vuelve más matizada, lo que refuerza la necesidad de un enfoque cauteloso.

En conclusión, la economía argentina se encuentra en una encrucijada. Si bien hay señales de recuperación, la inflación persistente sigue siendo un obstáculo importante. El año 2024 mostró una mejora considerable en la inflación, pero aún queda mucho por hacer para alcanzar niveles sostenibles. Para lograr un crecimiento económico sólido y duradero, es crucial abordar los desafíos estructurales y controlar las presiones inflacionarias.”

Análisis de Quasar Elizundia, Estratega de Investigación Experto – Pepperstone