Análisis de Mercado por Quasar Elizundia, Estratega de Investigación Expert@ en Pepperstone
4 de enero de 2025 –
“Las presiones bajistas han regresado para el peso mexicano, con la moneda experimentando sus primeros movimientos desfavorables de 2025, revirtiendo la recuperación previa y mostrando una depreciación del 0.4% frente al dólar estadounidense (USD/MXN). Esta tendencia, a pesar de la leve debilidad del dólar durante la sesión, llega en un momento crucial para la economía mexicana, caracterizado por datos macroeconómicos desfavorables, incluidos un aumento en el desempleo y una caída en la confianza del consumidor.Es importante destacar que varios factores externos e internos están ejerciendo presión sobre la moneda. En el ámbito internacional, la política monetaria de la Reserva Federal y la fortaleza de la economía estadounidense juegan un papel crucial. La expectativa de una postura restrictiva por parte de la Fed podría fortalecer al dólar, generando presión vendedora sobre el peso. Los sólidos datos del mercado laboral estadounidense alimentan la especulación de que la Fed podría mantener las tasas de interés sin cambios en su próxima reunión, lo que añade volatilidad al mercado cambiario. La posible inauguración de Trump y sus políticas comerciales también inyectan incertidumbre, afectando negativamente al peso.
A nivel nacional, la confianza empresarial en México cayó a 51.2 puntos en diciembre, el nivel más bajo desde enero de 2023, con retrocesos significativos en los sectores de la construcción y el comercio minorista. Esta debilidad, junto con una recuperación económica limitada, intensifica la presión sobre el peso. Aunque los sectores de servicios y manufactura muestran indicadores ligeramente positivos, no logran compensar completamente las pérdidas.
El mercado laboral presenta una perspectiva desafiante. La tasa de desempleo aumentó al 2.6%, mientras que el subempleo se encuentra en un preocupante 8.9%. Este alto nivel de subempleo, junto con la informalidad laboral que afecta a más del 50% de la fuerza laboral, revela debilidades estructurales en la economía mexicana, a pesar de las bajas tasas de desempleo. Cabe destacar que el desempleo femenino se sitúa en un 2.8%, superando ligeramente la tasa masculina de 2.6%.
De cara al futuro, es crucial monitorear datos clave como la confianza del consumidor, la inflación y la producción industrial. Los datos económicos débiles podrían erosionar aún más la confianza de los inversionistas y debilitar al peso.”
Análisis de Quasar Elizundia, Estratega de Investigación Expert@ – Pepperstone